Conectar con la feminidad sagrada es un camino y también un refugio.
La vida moderna no apoya nuestra naturaleza auténtica, la vida cotidiana tiende a separarnos de nuestras energías femeninas auténticas y esto nos lleva a desconectarnos de ellas y no reconocerlas ni reconocer sus regalos en nosotras.
Así pues conectar con la feminidad sagrada requiere que puedas encontrar un espacio de calma para realizar prácticas energéticas que te ayuden a restaurar, armonizar y expandir tu energía para poder interactuar con el mundo desde tus más altas habilidades, conciencia y amor.